viernes, 28 de agosto de 2009

Reynaldo Cantú: El Señor Director

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Por Malibè Rosas.

Hola! Otro fin de semana sin capítulo nuevo de La Vida sin Guión, pero con un post del blog. Por cierto, me enteré de muy buenas noticias en la última entrevista, pero no voy a soltar mis mejores cartas todavía. Por el momento, les diré que el estreno de la segunda temporada será este año; ya sé la fecha pero todavía no he sido autorizada para revelarla, además de algunas sorpresas muy agradables, que a su debido tiempo las sabrán.

Para cerrar la serie de entrevistas, el broche de oro lo pone Reynaldo Cantú, el Señor Director de la serie. Seguramente ya lo identificaron porque ha salido en algunos capítulos haciendo de él mismo.

Fan declarado del cine y los sitcoms, casi casi autodidacta y con una inclinación por la ficción, me cita en la oficina de Planeta Producciones (su casa productora) para charlar de él y de “La Vida sin Guión”.

Reynaldo es un muchacho joven y con amplia experiencia en la televisión local. Su trabajo ha sido atrás de cámaras pero, ahora sí, que ha hecho de todo.

Lo que tiene no es un gusto por el cine o la tele, yo le llamaría pasión. Desde niño le gustaron las cámaras, pero no estar al frente, sino atrás grabando. El primer contacto que tuvo con una, fue cuando a sus papás les prestaron una cámara de video para grabar un cumpleaños. Durante una semana, Reynaldo pasó grabando cosas, hasta que tuvieron que devolverla.

Aunque el cine era su más grande interés, escogió la carrera de comunicación, primero en Monterrey y luego regresó a Mexicali a la UABC. Ahí conoció más del mundo de la televisión al grado de que para realizar el servicio social, escoge lo que era el CABLECANAL, un canal de tv que tenía la empresa Cablemás. Ahí empezó a producir sus primeros programas, pero no sólo la producción: muchas veces le tocó estar en el switcher, en la cámara, contestar teléfonos, todo al mismo tiempo.

Estando en el canal, pidió la oportunidad del espacio para producir un programa propio, básicamente con sus recursos (aunque le prestaban el equipo de edición) , ese programa se llamaba Playback y era conducido por Arely Caballero. Gracias a ella, empezó a relacionarse con más gente del medio.

Al cerrarse el canal y con el finiquito que le dieron, Reynaldo empieza su casa productora Planeta Producciones, así se empieza a dotar de equipo técnico para trabajar: cámara, computadora, etc.

Después entra a trabajar al Canal 66 como freelance. Primero con dos producciones y poco a poco su trabajo empezó a llamar la atención de la gente, es así como después de un año trabajando en el canal, lo contacta Ricardo Gómez para trabajar un proyecto juntos. Este proyecto sería: Sabor del Mediodía.

Aquí coincide, además de Ricardo, con Anabel, Terezina y Felipe.

Reynaldo nos cuenta que desde niño le gustó hacer parodias, el y sus hermanos hacían parodias, y es justo en el programa “El Sabor del Mediodía” que se le presenta la oportunidad de explotar ese lado de la comedia: producir y dirigir cápsulas de parodias, a tal grado que en el tiempo que duró el programa, hubo dos programas especiales, donde las parodias se llevaron toda la hora.

Este experimento y el equipo de trabajo que se había conformado, dan pauta para que se empiece a gestar la idea de hacer un programa de comedia.

Es entonces que en el 2007, esta idea se madura a tal grado que se empieza a trabajar en un SITCOM: Con esta idea, Reynaldo y Ricardo empiezan un trabajo de mesa y creativo hasta llegar a los ensayos. Pero el proyecto se detiene ya que a Richy le viene un problema de salud y el proyecto queda pospuesto hasta nuevo aviso.

En este periodo Reynaldo empieza a estudiar las posibilidades de utilizar el internet para la transmisión de programas.

Cuando Ricardo empezó a recuperarse e irse reintegrando poco a poco al trabajo, retoman el proyecto del SITCOM, pero Ricardo todavía no estaba del todo bien para retomar el proyecto original, con todo el esfuerzo que significaba. Es entonces que piensan en un proyecto alterno, de capítulos cortos, menos producción y sin problemas de espacio: hacer una serie por internet. Para no desvincularla del todo con el proyecto original, se decide juntar al mismo elenco pero con otro giro: sería la vida de los actores de la serie, una especie de documental, un detrás de cámaras de lo que sería la serie original.

Con muchas ganas, empieza la preproducción: así un miércoles se hizo el guión y para el sábado empezaron a grabar.

Nos contó que muchas cosas del primer capítulo no estaban planeadas de esa formar y que el piloto son los dos primeros episodios.

Y es en ese momento que arranca lo que es nuestra serie favorita “La vida sin guión”.



LA VIDA SIN GUIÓN:


¿Qué es trabajar con el equipo de la Vida Sin Guión?

Es un equipo con el que me siento muy a gusto, nos acoplamos muy bien y ya tenemos mucho tiempo juntos. Trabajar con ellos es como regresar a casa, con ellos, las cosas fluyen.


¿Quiénes hacen los guiones?

Ricardo y yo, Un día, después de una grabación todos platicamos y salieron ideas, como el episodio de la despedida de soltera que lo propuso Anabel. Es más fácil cuando todos aportan.


¿Cómo ha sido interpretarte a ti mismo en la serie?

Nunca había actuado y es algo extraño, pero se necesitaba ese personaje. En realidad no estoy actuando, estoy siendo yo mismo.


¿Alguna anécdota con los invitados a la serie?

Con Jesús Ochoa fue algo nuevo trabajar con un actor de ese calibre. Fue muy fácil, el problema es que sólo teníamos una hora para trabajar con él. Con él sólo hicimos una toma, nomás, una por escena.

También el trabajar con Héctor Jiménez, actores con mucha experiencia en cine. Si imponen, y cómo director está el temor de no transmitir lo que quieres transmitir. Pero por su experiencia, les dices algo y rápido saben lo que quieres.


¿Alguna anécdota de grabación?

En el primer programa lo escribimos el miércoles y el sábado nos pusimos a grabar. En el guión no estaban contemplados los testimonios de los personajes, y por el ritmo de la grabación fueron saliendo.

Poco a poco se fue encontrando el ritmo y el tono. Si te fijas, los primeros capítulos son muy diferentes en el ritmo.

Otra anécdota es cuando grabamos afuera casi nos desmayamos por el calor que teníamos.


¿Cuál ha sido tu capítulo favorito?

Todos, pero particularmente el del aliento, aunque parezca muy simple; el de la despedida de soltera se me hizo muy curada; y el de Héctor Jiménez, con él fluye muy rápido la comedia.


Algún mensaje para los lectores del blog:

Que sigan viendo la serie, que sigan apoyando, que sigan comentando, eso es muy importante para nosotros. Esto lo hacemos para divertirnos pero el caso es que llegue a la gente, que nos digan que les gusta, que sigan viendo los episodios.

Esperen la segunda temporada, habrá muchas sorpresas, se seguirá el mismo estilo, se va desarrollar más la historia y los personajes, se les dará más peso.


Esta entrevista fue muy agradable, Reynaldo siempre estuvo dispuesto y con disposición , incluso a la hora de la crítica. Además confirma lo que se percibe en cada uno de los capítulos: la armonía del equipo de trabajo y el amor que le ponen.

Particularmente fue una gran suerte para mi participar en el episodio piloto, y aunque no quedé en el casting de actores (rápidamente me identificarán en el capítulo 1): el director me llamó para escribir el blog, cosa que me alegra mucho.

Por lo pronto los invito a que comenten para saber qué les parece, o sí quieren saber algo más de la serie, con gusto lo investigo.

Ahora si que como la gente pone en las fotos para compartir en internet: ¡Comenten, comenten, comenten!

Me despido y espero sus comentarios, porras, reclamos y lo que se les ocurra para este blog.

Saludos y nos leemos la próxima semana

Detrás de cámaras

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